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jueves, 24 de marzo de 2016

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jueves, 31 de diciembre de 2015

Emotiva victoria de despedida en Boston para Kobe Bryant (15+11)

Emotiva victoria de despedida en Boston para Kobe Bryant (15+11)

Bryant fue el gran protagonista de un partido con tintes históricos. El TD Garden, rendido a sus pies. Decidió con un triple marca de la casa el triunfo de los Lakers sobre los Celtics.

martes, 29 de diciembre de 2015

Los Bulls de Pau Gasol (22+7) ganan entre líos con Butler

Los Bulls de Pau Gasol (22+7) ganan entre líos con Butler

El español anota 13 puntos en el tercer cuarto, Rose y Snell brillan y cada vez son más fuertes los rumores que hablan de mala química del resto del vestuario con Butler.


Cuando parece que se meten en un bache serio, los Bulls sacan la cabeza. Justo después,casi, casi siempre pero están 7-2 en duelos directos con los cuatro primeros de cada Conferencia después de superar con cierta holgura (104-97) a unos Raptors a los que dejan en 19-13 por su 17-12. Entre 12 y 15 derrotas hay diez equipos, así que el Este es un galimatías ultra competitivo en el que todos aspiran a ser el gran rival de baile de los Cavaliers (y seguramente ninguno llegue a serlo tampoco esta vez) y todos lanzan mordiscos a todos. Si sigue así la situación, después del parón del All Star se desatará una batalla que se resolverá en cada partido, casi en cada posesión.
tropieza otra vez y caen de bruces. Pierden con equipos a los que deberían ganar
Los Bulls enseñaron a unos Raptors que por fin recuperaron a Valanciunas (9 puntos para entrar en calor) su mejor versión en ataque y una química en pista que muchas veces está ausente, también cuando ganan. Del 23-32 del primer cuarto al 96-82 ya avanzado el último sucedieron muchas cosas buenas para el equipo de Chicago, que veremos si encuentra un punto de apoyo o acaba otra vez patinando en cuanto caigan cuatro gotas. Lo mejor: Pau Gasol anotó 22 puntos (8/14 en tiros) y capturó 7 rebotes. También sumó 3 rebotes y 3 asistencias. 13 de sus puntos llegaron en un tercer cuarto en el que los Bulls amarraron definitivamente el mando y en el que entre el español y Derrick Rose sumaron 23 de los 29 que sumó su equipo. Rose, por cierto, terminó con 20 puntos y enlazó por primera vez en la temporada dos partidos en al menos esa cifra. Y en la extraña situación que viven los aleros de Hoiberg, esta vez Mirotic dio la de arena (2 puntos, 1/6 en tiros) con McDermott ausente por problemas de rodilla y un Tony Snell desatado: 22 puntos, 4/5 en triples y 14 puntos en el último cuarto. Otra buena noticia: sigue creciendo Portis, el rookie que por fin tiene los minutos que merece (12 puntos, 9 rebotes).
Las malas noticias, que también las hay, vienen porque se recrudecen los comentarios en torno a Jimmy Butler, que precisamente se quedó en 5 puntos (y 4 rebotes y 5 asistencias) el día en el que Derrick Rose encontró la forma de que su ritmo coincida con el de su equipo. Butler, con contrato millonario y ya condición de estrella, habría (según la prensa de Chicago) chocado ya con buena parte del vestuario, especialmente con algunos veteranos (Rose…) por su forma de asalta el liderazgo y su manera de ejercerlo, hasta el punto de que ya habría quien se está planteando si es el tipo ideal, más allá de su incuestionable ética de trabajo, para ser un verdaderojugador franquicia. Son rumores, pero lo cierto es que salen a la luz en cuanto las cosas se tuercen un poco: los Bulls habían perdido cuatro de sus últimos cinco partidos antes de este buen triunfo ante los Raptors de Lowry (28 puntos, 9 asistencias, 6 rebotes) y DeRozan (19+8+8).

Pau Gasol: "A Kobe le regalaría un fin de semana en Barcelona"

Pau Gasol: "A Kobe le regalaría un fin de semana en Barcelona"

El español habla con GQ de su relación con Kobe, de su pasión por la cocina y de los récords de los Warriors: "No quería que batieran el las 33 de victorias seguidas".


La edición estadounidense de la revista GQ ha publicado una entrevista muy personal con Pau Gasol en la que el ala-pívot español habla de su relación con Kobe Bryant y del adiós del mítico escolta, de su pasión por la cocina o de cómo eligió ser jugador de baloncesto y no médico. Este es un extracto con lo más destacado del artículo:
 ¿Dónde estabas cuando Kobe Bryant anunció que esta iba a ser su última temporada?
Estaba viendo partidos, que es lo que suelo hacer por las noches. Me sorprendió, al final daba la sensación de que iba a jugar siempre… Pero al final a todo el mundo le llega su momento. Creo que fue una despedida elegante y en el momento adecuado. Ahora ha podido quitarse esa presión y disfrutar de los partidos.
Él siempre dice que fuiste uno de los mejores compañeros que ha tenido, ¿te costó que hubiera química entre vosotros?
Nos entendimos bien desde el principio. En cuanto aterricé en Washington, donde estaban los Lakers, vino a mi habitación del hotel a la una de la mañana y me dijo “bienvenido. Ahora vamos a ganar un título”. Los dos teníamos las mismas ganas de ganar.
Kevin Durant, gran amigo de Kobe, dijo a los periodistas que estaban tratando a Kobe “como a una mierda” cuando estaba haciendo malos partidos en noviembre. ¿Crees que la prensa ha sido injusta con él este año?
Sí que creo que se le ha tratado de forma un poco injusta. Ha tenido una carrera increíble, es uno de los mejores de la historia. La prensa hace su trabajo pero creo que Durant quería decir que no se valoraba su leyenda y sólo se quería hablar de sus malos porcentajes en determinados partidos.
¿Qué regalo de despedida le harías?
Es difícil regalar a alguien que puede tener lo que quiera… no sé, quizá un fin de semana de diversión por Barcelona. Que fuera con su familia y llevarles a una bodega a hacer una cata, a algunos restaurantes, a recorrer la ciudad… algo tranquilo.
Eres un pívot bastante clásico en una NBA que está cambiando al ritmo de los Warriors, que juegan con quintetos pequeños y tiran por fuera sin parar. ¿Te supone eso una presión especial?
Un poco sí. Tienes que saber adaptarte a cómo va cambiando el baloncesto. Antes los pívots eran más determinantes pero, al final, casi nadie puede jugar como los Warriors y a veces es un error intentar replicarlo: sólo ellos tienen a Curry, a Klay Thompson, a Draymond Green… Cada equipo tiene que tratar de aprovechar sus virtudes.
¿Querías, una vez que os ganaron a vosotros, que batieran el récord de las 33 victorias seguidas de los Lakers?
No, quería que esa marca siguiera siendo de los Lakers. A aquellos Lakers les entrenaba Bill Sharman, al que admiraba mucho. Incluso dije unas palabras en su funeral. Quería que siguiera el récord antiguo sobre todo por él.
¿Cuál es el equipo más difícil de batir al que te has enfrentado?
Los Lakers de Shaquille O’Neal y Kobe Bryant. Y después los Spurs. Y también los Celtics, claro. Las dos finales que jugamos contra ellos fueron muy duras.
Te encanta la comida, ¿hay algún tipo o plato que todavía no hayas probado?
Me gusta probar de todo pero hay cosas que no me atraen a priori: insectos, gusanos, sesos… No sé si algún día probaré esas cosas pero no lo estoy deseando por ahora, la verdad.
¿Y qué es lo más raro que has probado?
En Sudáfrica comí algo muy extraño. No sé si eran sesos de cordero o intestinos de cerdo o qué. Tenía hambre y estábamos en un buffet. No sé qué era pero me lo comí.
En Chicago se prepara una pizza muy característica y muy famosa. ¿Te gusta?
La he probado y no me gusta mucho. Para mi es como un pastel de queso fundido. Me gustan más las pizzas de base más fina.
Tuviste que elegir entre jugar al baloncesto y ser médico…
Fue un riesgo, yo sentía que podía ser bueno jugando al baloncesto pero mis padres tenían dudas, no querían que dejara de estudiar medicina. Les convencí diciéndoles que si en un par de años no hacía carrera, lo dejaría y retomaría mis estudios.
¿Qué le falta a una carrera tan exitosa como la tuya para poner el broche de oro?
Diría que el oro olímpico. Si lo gano podría retirarme (risas) Simplemente juego porque me gusta. Seguir ahí después de 15 años en la NBA tiene mérito, estoy muy orgulloso de eso.

Curry: 17 puntos en 3 minutos y triple-doble... con 14 rebotes

Curry: 17 puntos en 3 minutos y triple-doble... con 14 rebotes

Entre Curry (triple-doble en 30 minutos), Thompson y Green suman 77 puntos y 16 triples. La expulsión de Cousins sacó del partido a los Kings pese a los 9 triples de Casspi.

Un consejo para Omri Casspi (que está firmando una excelente temporada, por cierto): si vas a meter 36 puntos con un 9/12 en triples y si vas llegar al descanso con 26 y 7/9, mejor que no sea en Oakland. Porque en la Bahía ni va a servir el 99,9% de las veces para que gane tu equipo (no si juegas en Sacramento Kings) ni te va a hacer un hueco entre los titulares de la prensa. Por todo lo que hacen los demás, incluido en este caso un compañero: DeMarcus Cousins perdió la cabeza tras una personal confusa y, mientras soltaba brazos al aire, fue expulsado. Acababa de hacer un mate bestial y los Kings ganaban 64-66 después de tres minutos de tercer cuarto. Fue, aviso para los que quieran rescatar los tópicos en torno a él, la primera expulsión de la temporada para el pívot, cuya ausencia dejó a sus compañeros sumidos en un trance de extrañeza que les llevó a encajar un parcial de 15-0 en menos de cuatro minutos. Y partido listo (122-103 final). Así son las cosas en la Bahía, por mucho que Casspi se disfrace de Larry Bird.
Y ahora, los Warriors, que están 29-1 (marca jamás alcanzada por nadie) y que han ganado sus cinco partidos en casa después de la derrota en Milwaukee, ya lejana. Cerrarán el año con unback to back en Texas (Dallas y Houston, 30 y 31), y con al menos un triunfo estarán por debajo de las tres derrotas (en menos partidos: 25-3) que los Bulls del 72-10 en su Fin de Año. Y cierran 2015 con un balance de 42-1 en su Oracle Arena (en Regular Season y con 33 victorias seguidas). Sólo los Magic de 1995 (con Shaquille O’Neal) habían ganado 42 partidos como locales en un año natural (y perdieron uno más 42-2). Su único (y por ahora pequeño) problema son las cuestiones físicas: Harrison Barnes sigue a punto de volver pero sin volver (no juega desde el 27 de noviembre) y Ezeli terminó el partido ante los Kings con un pie tocado.
Y ahora, la habitual ensalada loca de números que suele dejar uno de los mejores equipos de la historia: 20 triples (con un 48% colectivo…) y 43 canastas a partir de 33 asistencias. Un último cuarto para el disfrute de Clark (12 puntos) y McAdoo (7 y 6 rebotes) y tres anteriores para otra exhibición del big threeentre los tres, 77 puntos y un 16/32 en triples. Y 27 rebotes, y 16 asistencias… El reparto, así: un Draymond Green en estado de gracia fijó su tope de puntos de la temporada en 25, con un 5/7 en triples, 8 rebotes y 4 asistencias. Klay Thompson sumó 29 puntos (5/12 en triples) y aportó 5 rebotes. Y el resto, Stephen Curry, que no jugó en el último cuarto y había firmado un triple-doble, primero de la temporada para él, a falta de tres minutos para el final del tercer parcial. Anotó 23 puntos (6/13 en triples), repartió 10 asistencias y batió el récord de su carrera en rebotes: 14, todos en defensa. Y con todo, ese 23+14+10 no fue lo mejor del mejor: en los últimos tres minutos del segundo cuarto (3:17, exactamente) anotó 17 puntos seguidos después de haber llegado a ese punto a cero. Ningún otro warrior anotó durante un trance de seis canastas alucinantes sin fallo, cinco de ellas triples…Así fue su primer tiempo desde la línea de tres: 0/5 en los primeros 20 minutos que jugó, 5/5 en los siguientes 3. Y 29-1. Y 33 seguidas en casa. Y, y, y

Ricky (14 asistencias) no puede con los Spurs... de Messina

Ricky (14 asistencias) no puede con los Spurs... de Messina

Recital de Marjanovic con Ettore Messina al frente tras la expulsión de Popovich en los Spurs. Los Wolves acumulan ya 12 derrotas en sus últimos quince partidos.

Después de comenzar la temporada 8-8, y  con algunos triunfos en pistas muy complicadas del Este que llevaron a los más madrugadores a llevarse a la boca aquello de la lucha por los playoffs que es terreno desconocido en Minnesota, a los Timberwolves les ha llegado un terrible baño de realidad: 12 derrotas en 15 partidos y 11-20 yaSólo son peores que ellos Sixers y Lakers y, por los pelos, Nets y Pelicans. De todas formas y dentro de su mal final de año, no es lo peor del mundo perder dando la cara en San Antonio (101-95), donde los Spurs están 18-0 (27-6 total) y son el primer equipo del Oeste que inicia una temporada con 18 triunfos sin fallo en su pista desde los Rockets de 1986. Todo queda en Texas.
Los Wolves comenzaron 0-10 y llegaron a un 6-18 propulsado por cinco asistencias de Ricky Rubio, que terminó con 14, 5 rebotes, 4 robos y otra, vez, su principal laguna en la anotación: 7 puntos, 2/9 en tiros. Poco a poco, los Spurs fueron imponiendo la lógica, aunque lo hicieron de un modo algo ilógico: Popovich fue expulsado en el segundo cuarto por protestar yEttore Messina se puso al frente del equipo. Tim Duncan no jugó por problemas físicos y el catalizador de la reacción spur fue Boban Marjanovic, que en menos de 15 minutos aportó 17 puntos con un 7/7 en tiros, y 4 rebotes. El gigante serbio va encontrando su sitio y está empezando a ser lo que su mezcla de talento y tamaño prometía: un especialista al que los Spurs pueden sacar minutos de calidad. Lo dijo David West tras el partido: “Como mide 2,21 la gente se cree que sólo es un corpachón enorme, pero se trata de un jugador extraordinario”. Sí que lo es.
Junto a Marjanovic, Ginóbili (13 puntos, 4 asistencias) y Mills (11) empujaron desde la segunda unidad en un día muy discreto de Parker (6 puntos, 2/9 en tiros) y Aldridge (6 y 3/8). En los Wolves, Wiggins anotó 18 puntos y Towns sumó 10 y 12 rebotes. Pero ahora mismo parece un equipo que, un año más, se está acostumbrando demasiado pronto a perder y perder…

LeBron supera a English y Kyrie Irving salva a los Cavaliers

LeBron supera a English y Kyrie Irving salva a los Cavaliers

LeBron se coloca en el puesto 17 de la lista de anotadores históricos tras sumar 14 puntos en Phoenix, donde Kyrie Irving salvó a los Cavaliers con un triple decisivo.

Después de perder en Oakland y de hacer el ridículo en Portland, los Cavaliers necesitaban ganar ya en su gira por el Oeste. Y lo hicieron en Phoenix (97-101)… por los pelos. Fueron siempre por delante, tenían una ventaja cómoda en el ecuador del último cuarto (82-91)… pero volvieron a jugar mal en los últimos minutos.
Los Suns, que están en pleno bache (cinco derrotas seguidas) con Bledsoe lesionado y Markieff Morris sancionado, estuvieron a punto de darles un disgusto: remontaron hasta el 95-96 y ahí una falta en ataque de Tyson Chandler anuló un triple de Knight y a continuación llegó otro de Kyrie Irving, sobre la bocina de posesión y a falta de 21 segundos (95-99).
El base, en el cuarto partido desde su reaparición, anotó los 7 últimos puntos de los Cavs, en los que no vio aro nadie más en los últimos cuatro minutos. En ese tramo LeBron falló dos triples y dejó un total de 1/5 en un partido discreto: 14 puntos, 4 rebotse, 7 asistencias. Pero un partido que le sirvió para (25623 puntos ya) colocarse en el puesto 17 de la lista histórica de anotadores. En 939 partidos ha superado a Alex English y, curiosamente, tiene por delante a tres que siguen en activo: Kevin Garnett, Paul Pierce y Tim Duncan. Irving terminó con 22 puntos y Kevin Love con 16 y 7 rebotes en unos Cavaliers que no están desde luego en buen momento. Tampoco los Suns: 18 puntos de Knight y 23 para TJ Warren.